martes, 26 de marzo de 2013

Reflexiones de un Vampiro Vampirizado. Josheras

PRIMERA PARTE


Aquí estoy,  esperando mi turno,  esperando el cruel martirio que han de infligirme estos humanos.
Estoy tumbado, dentro de una tosca caja de pino, en la antesala del laboratorio de extracciones.
Desde esta destapada caja se divisa un espacio cóncavo de alrededor de 9 metros cuadrados. Sus paredes, están recubiertas de espejos incluidas las puertas.
Empotrados en el techo, dos grandes cilindros en forma de cruz, lanzan su luz cegadora hacia ésta caja de pino.
Pequeños butafumeiros esparcidos por el suelo, expanden por la habitación  humo con un fuerte olor a ajo.
Este  caótico recinto me impide moverme, de modo que espero mi turno con los ojos  totalmente cerrados. Así en esta cruel espera recuerdo otros tiempos.
Me veo merodeando por los alrededores de mi querido Castillo de Vlad, en el centro de mi añorada Rumanía.
Me veo libre, volando sobre los tejados de pizarra del castillo. En esos tejados, afilo mis colmillos, mientras observo a los traviesos murciélagos balancearse en los salientes de los muros.
Existían abundantes vampiros en toda Transilvania. Nos sentíamos orgullosos de ser una “especie respetada, yo desconocía por qué, ¡era tan joven! Más tarde, me enteré que la razón era el turismo.
Rumanía nos necesitaba para atraer a otras gentes, porque dejaban sus divisas en un país algo decrépito.
Pero nosotros los vampiros, sacábamos poco beneficio de aquellos extranjeros, ellos, cada vez venían más preparados para resistir nuestros ataques.
Traían grandes cruces colgando de sus mochilas. Caminaban con estacas de fresno  de punta afilada. Portaban ristras de ajo alrededor de su cuerpo y llenaban las noches de un olor nauseabundo.
Aquellas gentes, eran intrépidas, no les importaba salir a cualquier hora  yendo con semejantes amuletos.
Al principio de la llegada de estos bárbaros,  todavía podíamos coger algún despistado, olvidadizo de sus amuletos.
Yo era ágil para capturar mi presa, planeaba sobre los grupos de humanos buscando al indefenso.
Procuraba que fuese una persona fuerte y saludable y cuando la prendía, mis dentellazos  iban derechos a su yugular,  entonces  yo sorbía y sorbía con fruición su sangre  hasta que el individuo caía anémico al suelo.
El sabor de la sangre de estos extranjeros, era especial, se notaba la gran cantidad de hematíes que contenía. Ellos, a diferencia de los rumanos, comían más proteínas, que enriquecían su sangre un sabor y un grosor hasta entonces desconocido por mí.
En aquella época, empezó la escasez para todos.
Los vampiros aumentaban porque nuestra noble casta de antaño, se vio engrosada por los nuevos vampiros bárbaros, que ansiosos de sangre e ignorantes de nuestras tácticas, chupaban la sangre de los animales domésticos.
Los humanos de Transilvania y ciudades limítrofes huían del vampirismo y de la falta de alimentos. No había trabajo y pronto se dieron cuenta que el turismo no era la solución para sus problemas.
Así, familias enteras de humanos  emigraron a otros países, países

3 comentarios:

  1. HOLA JOSE, PASO A CORREGIRTE EL TEXTO DEL VAMPIRO, ESPERO QUE SE ENTIENDA BIEN. LO COPIO TAL CUAL Y TE PONGO ENTRE PARÉNTESIS Y MAYÚSCULAS LAS CORRECCIONES).





    Aquí estoy, esperando mi turno, esperando el cruel martirio que han de infligirme estos humanos. (hay dos esperando seguidos)


    Estoy tumbado, dentro de una tosca caja de pino, en la antesala del laboratorio de extracciones. (Hay dos estoy, yo quitaría el segundo) y haría una sola frase.

    Así:

    Aquí estoy, esperando mi turno para el cruel martirio que han de infligirme estos humanos. Tumbado, dentro de una caja de pino, en la antesala del laboratorio de extracciones.






    Desde esta destapada caja (mejor pon CAJA DESTAPADA) se divisa un espacio cóncavo de alrededor de 9 metros cuadrados. Sus paredes (SOBRA LA COMA) están recubiertas de espejos incluidas las puertas.
    Empotrados en el techo, dos grandes cilindros en forma de cruz, lanzan su luz cegadora hacia ésta caja de pino.
    Pequeños butafumeiros ( BOTAFUMEIROS) esparcidos por el suelo, expanden por la habitación humo con un fuerte olor a ajo. (UN HUMO CON FUERTE OLOR A AJO)





    Este caótico recinto me impide moverme, de modo que espero mi turno con los ojos totalmente cerrados. Así (ESTOY) en esta cruel espera, (COMA) recuerdo otros tiempos.


    Me veo (RECUERDO) merodeando por los alrededores de mi querido Castillo de Vlad, en el centro de mi añorada Rumanía.
    Me veo libre, volando sobre los tejados de pizarra del castillo. En esos tejados (SOBRA LA COMA) afilo mis colmillos, mientras observo a los traviesos murciélagos balancearse en los salientes de los muros.



    Existían (ERAMOS) abundantes vampiros en toda Transilvania. Nos sentíamos orgullosos de ser una “especie respetada" (COMILLAS). (PUNTO) yo desconocía por qué, ¡era tan joven! Más tarde, me enteré que la razón era el turismo.



    Rumanía nos necesitaba para atraer a otras gentes, porque dejaban sus divisas en un país algo decrépito.
    Pero nosotros los vampiros, sacábamos poco beneficio de aquellos extranjero. (PUNTO) ellos, cada vez venían más preparados para resistir nuestros ataques.



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  2. Traían grandes cruces colgando de sus mochilas. Caminaban con estacas de fresno de punta afilada. Portaban ristras de ajo alrededor de su cuerpo y llenaban las noches de un olor nauseabundo.


    Aquella (SINGULAR, EL PLURAL YA ESTA EN LA PALABRA GENTE) gente (SOBRA LA COMA)eran intrépidas (ERA INTREPIDA), no les importaba salir a cualquier hora yendo con semejantes amuletos.

    aSÍ:

    Aquella gente era intrépida. No les importaba salir a cualquier hora PORTANDO (MEJOR PORTANDO) semejantes amuletos.




    Al principio de la llegada de estos (ESOS)bárbaros, todavía podíamos coger algún despistado, olvidadizo de sus amuletos. (YO PONDRÍA: ALGUN DESPISTADO, SIN AMULETO).


    Yo era ágil para capturar mi presa, planeaba sobre los grupos de humanos buscando al indefenso.
    Procuraba que fuese una persona fuerte y saludable y cuando la prendía, mis dentellazos iban derechos a su yugular. (PUNTO) Entonces, (COMA) yo sorbía y sorbía (QUITA UNO DE LOS DOS SORBIA) con fruición su sangre hasta que el individuo caía anémico al suelo.



    El sabor de la sangre de estos extranjeros (QUITA LA COMA) era especiaL. (PUNTO)se notaba la gran cantidad de hematíes que contenía. Ellos, a diferencia de los rumanos, comían más proteínas, que enriquecían su sangre (CON) un sabor y un grosor hasta entonces desconocido por mí.


    En aquella época, empezó la escasez para todos.
    Los vampiros aumentaban porque nuestra noble casta de antaño, se vio engrosada por los nuevos vampiros bárbaros, que, (COMA) ansiosos de sangre e ignorantes de nuestras tácticas, chupaban la sangre de los animales domésticos.


    Los humanos de Transilvania y ciudades limítrofes huían del vampirismo y de la falta de alimentos. No había trabajo y pronto se dieron cuenta que el turismo no era la solución para sus problemas.
    Así, familias enteras de humanos emigraron a otros países. (HAS REPETIDO PAIS, IMAGINO QUE NO TE HAS DADO CUENTA).


    DE MOMENTO, ESTO ES TODO, ESPERO QUE LO HAYAS PODIDO ENTENDER BIEN. CUALQUIER DUDA, QUE TENGAS, ME PREGUNTAS.

    UN BESO. ISABEL.

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